El adarve o paseo alto de la muralla es un área panorámica sobre la socampana mirobrigense y sobre buena parte de la comarca. Todo el cinturón de muros y de praderas de vegetación espontánea aporta un hábitat apropiado para muchas especies, con más de 13 hectáreas de superficie, una extensión que supone casi la mitad de la que tiene toda la ciudad intramuros. Los paseantes pueden realizar varios circuitos por este entorno: sobre la muralla, bajo ella, en los fosos y en el glacis… O bien nos podemos plantear un combinado de todas estas partes.
Flora: jardín del Parador, abrigado bajo el castillo. Árboles ornamentales; plantas rupícolas como la milamores (Centranthus ruber), que cuelga de la muralla sus flores rosas o blancas. Vegetación espontánea: floración de marzo a octubre, máxima entre marzo y junio.
Fauna: aves como la cigüeña blanca, el roquero solitario, el vencejo común; rapaces diurnas como el aguililla calzada y nocturnas como el cárabo común. Reptiles como la salamanquesa común o la lagartija cenicienta (Psammodromus hispanicus), una especie de lagartija de pradera exclusiva de la península ibérica.
Época recomendada: primavera a otoño.
